Comentario

Este recorte de periódico forma parte del artículo "Spanish-American Poets" de Thomas Walsh.1 El retrato de Tablada también apareció en el semanario venezolano Actualidades. Según los datos consignados en su Diario, Tablada conocía a Ignacio Rosas (1880-1950) pintor veracruzano que estudió en la Escuela de Bellas Artes, en Europa y Estados Unidos, de donde volvió en 1911 desde 1904, pues el 30 de septiembre de ese año registra que recibió una visita de Montenegro, F. Galván y Nacho Rosas. Durante la visita, Rosas le obsequió algunas reproducciones de grabados de Aubrey Beardsley y Tablada les regaló dos dibujos originales de Ruelas.2

Otro dato del contacto de Tablada con Rosas se encuentra en una de sus crónicas neoyorquinas en la que describe la "metamorfosis" de Tata Nacho, Ignacio Fernández Esperón, de músico bohemio, pianista con melena de cirquero, a autor serio con dos obras exitosas en Nueva York: un ballet decorado por Best Maugard, en el Strand, y otro, titulado Garrick Gaities, en colaboración con Covarrubias, en el Teatro Guild. Tablada cuenta que conoció a Tata Nacho, en los "turbios días carranclanes" en que el "trovador demótico", manoteando al piano, se convertía en el núcleo musical del "pandemonium abracadabrante", en el que se transformaba el estudio del manso pintor Nacho Rosas, por la invasión de los "menudos  miembros de la Edad de Piedra revolucionaria".3

Tablada volvió a utilizar el retrato que le hizo Rosas como portada para un folletín propagandístico de su obra editado, sin fecha, en Nueva York. En él incluyó varias imágenes de unos grabados que Covarrubias realizó para acompañar el proyecto de libro "La Babilonia de Hierro".

rms

New York Times Book Review, 21 de enero de 1923.

Obras IV. Diario (1900-1944), edición de Guillermo Sheridan, México, Universidad Nacional Autónoma de México, (Nueva Biblioteca Mexicana, 117), 1992, p. 41.